En el pasado mes de febrero del presente año, el Centro de Estudios Convivencia celebró su Cuarto Encuentro de Pensamiento y Propuestas para Cuba, con el tema: “Los Medios de Comunicación Social y las nuevas Tecnologías de la Información y las Comunicaciones”. El informe de estudios emanado del trabajo de más de 35 intelectuales y estudiosos del tema en Cuba será publicado en pocos días en www.centroconvivencia.org. Sin embargo quisera hacer algunos apuntes acordes con lo derivado de la opinión de expertos y ciudadanos, y de profesionales del gremio.
Estos podrían ser considerados los tres principales retos del periodismo y los periodistas en la actualidad:
- Tener clara conciencia de que el periodismo es un medio al servicio de la persona y no deberá convertirse en un modelo de negocio. Hay mucho menor interés por el periodismo, mientras les interesan primeramente las cuentas a quienes lo hacen.
- La generación de noticias falsas o fakenews hace aumentar la métrica de las páginas y a su vez son las más vendidas y mejor pagadas.
- Los ciudadanos se convierten en clientes o súbditos de poderes desconocidos.
Ante estos desafíos podemos proponer las siguientes acciones:
- Acudir a las informaciones reales, serias, contrastadas con nombres y apellidos, para evitar los autores desconocidos y/o dudosos.
- Formación de un criterio, de lo contrario se convierte el ciudadano en seguidor condicionado y orientado hacia una determinada dirección.
- Seguir contando lo que el periodista considera que es necesario que sepamos, que a veces pone en riesgo la vida de los ciudadanos de la sociedad, pero debe hacerse siguiendo códigos éticos fortalecidos en la verdad y el compromiso.
Informar con tono moderno, directo, valiente, con cierta “laxitud europea” entendida como imparcialidad y discriminación responsable, puede contribuir a tener más oyentes, lectores o suscriptores. El profesionalismo periodístico es también responsabilidad política y democrática.
Sin una sociedad informada no hay democracia posible.
Yoandy Izquierdo Toledo (Pinar del Río, 1987).
Licenciado en Microbiología.
Máster en Bioética por la Universidad Católica de Valencia y el Centro de Bioética Juan Pablo II.
Miembro del Consejo de Redacción de la revista Convivencia.
Responsable de Ediciones Convivencia.
Reside en Pinar del Río.