Hoy terminamos la trilogía que conforma la plegaria que rezaba el Padre Manolo de Céspedes, en cada Misa, después de la oración del Padrenuestro: “Líbranos del miedo, del egoísmo, de dejarnos arrastrar por el ambiente”
Hoy es 10 de abril, una fecha que para Cuba viene preñada de acontecimientos históricos. Todos ellos marcaron hitos en la construcción de la nación pero, cuando se habla de ellos en clave de “continuidad” deberíamos ser más cuidadosos. Su interpretación y reinterpretación ha provocado, en disímiles ocasiones, que la realidad discursiva, a la fuerza, empate un momento con otro incompatible, y reconduzca todo por los caminos hacia dónde se quiere l...
El lunes pasado comencé a comentar acerca de una plegaria que agregaba, después del Padrenuestro en la Misa, mi compadre el Padre Manolo, quien fuera obispo de Matanzas y que rezaba así: “Líbranos del miedo, del egoísmo, de dejarnos arrastrar por el ambiente
Desde tiempos inmemoriales la civilización humana se ha organizado en comunidades, unas veces de acuerdo a intereses económicos, otras veces políticos y otras religiosos. Lo cierto es que, con la evolución de la sociedad, el desarrollo de las relaciones sociales, el trabajo, la comunicación y fenómenos más contemporáneos como las redes sociales y la globalización, la persona humana no se considera un ente aislado, sino el centro de múltiples interacciones...
Hace unos días falleció un gran amigo, hermano y sacerdote, el Padre Monseñor Manolo de Céspedes, último descendiente directo del Padre de la Patria. Aprendí mucho como ser humano y como cristiano formando un equipo de trabajo, de sacrificios y esperanzas, con dos personas: el obispo Siro y el padre Manolo
Ser fanático no es bueno. El fanatismo es un apasionamiento desmedido en la d efensa de creencias y opiniones personales, especialmente religiosas o políticas. A veces llega a ser irracional porque esa pasión extrema tiende a anular la razón. En el mundo en que vivimos solemos convivir con fanáticos del deporte, de la música y de sus representantes, de los animales, pero quizá en esas esferas no es tan notable como en otras que tienen que ver con...
Como sólo se puede distribuir lo que se produce y el sistema totalitario implantado en Cuba cada vez produce menos, el racionamiento disminuye de forma alarmante
He hablado de la crisis terminal y el dolor desgarrador que se vive y se sufre dentro de la Isla por tantos motivos. Hoy quiero referirme a un dolor compartido entre todas las orillas de nuestra nación desmembrada.
Hace varios años, en una seria conversación sobre el futuro de Cuba, ante el optimismo y las ganas de comenzar a pensar en el mañana, desde abajo y en pequeño, alguien dijo en público que ese trabajo era superfluo. Poco tiempo después, por aquello de que la vida nos da lecciones con el paso implacable del tiempo, lo que parecía superfluo
Estamos viviendo, en Cuba y en el mundo, tiempos de desconcierto. Es una mezcla de cambio de paradigmas, medidas económicas drásticas, abandono de alianzas políticas, ruptura de modelos sociales, desarraigos de lo mejor de la cultura occidental de raíz cristiana, entre otras fuentes de desconcierto