Cada vez son más los menores de edad que acceden a todo tipo de contenidos de adultos sin la previa supervisión de personas mayores de edad. Se hace habitual que los más chicos de casa vean en la televisión, y desde Internet, contenidos altos en violencia, sexualidad, entre otros.
Muchas veces los padres no tienen en cuenta lo que sus hijos están haciendo desde los dispositivos móviles, o lo que ven desde las computadoras de sus padres o programas televisivos. Existe gran diversidad de contenido el cual no es adecuado para que los menores vean, ni entiendan, por lo que es muy importante estar atentos a lo que estos ven y escuchan.
En Cuba es habitual en la noche ver las novelas que transmite la televisión cubana, y muchas familias permiten que los menores las vean también. Estas novelas no son acordes para que los niños las vean, tratan muchos temas que son difíciles de explicar y entender a tan temprana edad, sin embargo, muchas familias permiten a sus hijos que las vean.
Los padres muchas veces les dan a sus hijos sus teléfonos celulares conectados para que jueguen y accedan a Internet sin controlar lo que están viendo, y a qué página o sitio web accedieron. Internet es una amplia red de contenidos infinitos la cual no está exenta de riesgos, sobre todo para los niños que los desconocen.
Los niños aprenden con mucha facilidad, son como esponjas que lo absorben todo, su nivel de captación suele ser alto, por lo que es importante brindarles el contenido necesario que ellos pueden comprender fácil y sanamente. Velar por ello es tarea de los padres.
- Rosalia Viñas Lazo (Pinar del Río, 1989).
- Miembro del Consejo de Dirección del CEC.