La Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, en su artículo 5, reza que la soberanía reside intransferiblemente en el pueblo, quien la ejerce directamente en la forma prevista en esta Constitución y en la ley, e indirectamente mediante el sufragio por los órganos que ejercen el Poder Público. Los órganos del Estado emanan de la soberanía popular y a ella están sometidos.
1) Por cuanto la Constitución es la ley primera de la República, la soberanía reside en el pueblo, la ejerce indirectamente mediante el sufragio, y los órganos del Estado emanan y están sometidos a la Constitución y a la soberanía popular.
2) Por cuanto en las elecciones del 28 de julio de 2024 el pueblo mediante sufragio eligió de forma abrumadora al candidato de la oposición.
3) Por cuanto el gobierno y todos los órganos del Estado, entre ellos la Comisión Nacional Electoral (CNE), están en la obligación de publicar las actas con los resultados.
4) Por cuanto la CNE, violando sus obligaciones, tres semanas después de las elecciones no ha publicado el resultado, mientras la Plataforma Unitaria en una página web publicó copias de más del 80% de las actas de votación demostrativas de que el vencedor es el candidato de la oposición.
5) Por cuanto, excepto algunos regímenes aliados con Nicolás Maduro, la mayoría de la comunidad internacional ha reconocido la victoria de Edmundo González o ha exigido que se publiquen las actas, incluyendo la reciente declaración suscrita por 22 países, incluida la Unión Europea.
6) Por cuanto el chavismo, especialmente desde que Maduro asumió la presidencia, ha incurrido en fraudes y ha usado el poder del Estado para descalificar, deshabilitar, reprimir y colocar en desventaja a sus contrincantes, como ocurrió con su dudosasvictorias en las elecciones de 2013 frente a Henrique Capriles –224 268 de casi quince millones de votos–, y en las presidenciales de 2018 frente Henri Falcón y Javier Bertucci, en las que el C NE lo declaró vencedor con cerca del 68% de los votos.
7) Por cuanto para el pueblo de Venezuela –autor de la victoria–, para la comunidad internacional y para el propio gobierno de Maduro, el triunfo arrollador de la oposición no ofrece dudas.
8) Por cuanto de aceptarse la repetición de las elecciones, habría previamente que:anular la competencia del CNE que violó la Constitución, aceptar la presencia de todos los observadores internacionales y no los que Maduro decida, posibilitar la participación a todos los venezolanos que residen en el exterior, anular la medida que inhabilitó a las candidatas opositoras María Corina Machado y Corina Yoris, liberar a los miles de detenidos que protestaron por el fraude del 28 de julio; y ofrecer garantías a los venezolanos y a la comunidad internacional de que esas exigencias se cumplirán estrictamente.
9) Por cuanto el Parlamento venezolano, con el objetivo de mantener a Maduro en el poder, se propone restringir aún más a las organizaciones no gubernamentales, los derechos civiles y la libertad de prensa: con ese fin se aprobó una nueva ley para limitar el trabajo de las organizaciones no gubernamentales; a la vez el presidente del Parlamento propuso introducir reformas electorales para que “ningún extranjero” se pronuncie sobre comicios en el país, lo cual indica claramente la intención de blindar a un régimen que ha sido derrotado por el pueblo.
10) Por cuanto la CNE y todos los órganos gubernamentales supeditados al chavismo están actuando anticonstitucionalmente.
Por tanto, la sugerencia de los mandatarios Luis Ignacio Lula da Silva de Brasil y Gustavo Petro de Colombia o de cualquier otra personalidad o institución acerca de repetir las elecciones de Venezuela, además de inaceptable y sospechosa de compromiso con el derrotado, arroja perjuicios sobre su propia ideología y reputación; pero sobre todo constituye una falta de respeto a un pueblo que durante veinticinco años viene luchando y pagando con sangre el precio de su libertad.
Además, por lo que Maduro ha demostrado, la posibilidad de nuevas elecciones en las condiciones actuales ha perdido todo sentido, pues no hay –aunque él lo jurara– la más mínima garantía de que ante una nueva derrota abandone el poder, que es lo que el pueblo de Venezuela necesita y merece después de tantos años y tanta sangre derramada.
De la experiencia de Venezuela se pueden extraer muchas conclusiones, tres de ellas sonlas siguientes:
Lleida, 18 de agosto de 2024
- Dimas Cecilio Castellanos Martí (Jiguaní, 1943).
- Reside en La Habana desde 1967.
- Licenciado en Ciencias Políticas en la Universidad de La Habana (1975), Diplomado en Ciencias de la Información (1983-1985), Licenciado en Estudios Bíblicos y Teológicos en el (2006).
- Trabajó como profesor de cursos regulares y de postgrados de filosofía marxista en la Facultad de Agronomía de la Universidad de La Habana (1976-1977) y como especialista en Información Científica en el Instituto Superior de Ciencias Agropecuarias de La Habana (1977-1992).
- Primer premio del concurso convocado por Solidaridad de Trabajadores Cubanos, en el año 2003.
- Es Miembro de la Junta Directiva del Instituto de Estudios Cubanos con sede en la Florida.
- Miembro del Consejo Académico del Centro de Estudios Convivencia (CEC).