Reo
Orlando Zapata en memoriam.
Miro la tarde pasar
entre barrotes de esta Isla que llevo a cuestas,
silencio eterno,
cuando se escurre el Sol por la abertura de un tragaluz.
Trago en seco y un montón de miedos suben por mis piernas.
Mientras tanto un carcelero indiferente
retira del resquicio de la puerta un puñado de semillas.
Mañana
Mañana serás más viejo.
Tendrás en tu mano un legajo de recuerdos
y en los pies muy pocos vestigios de la tierra
que soportó el peso de tu cuerpo la primera vez.
Mañana;
mañana será otro día cualquiera,
la tele hablará de hombres bomba,
niños hambrientos,
desempleo…
pero mañana sentirás el peso de los días que pasan
sin que te des cuenta
y las semanas, con calles de un solo sentido,
los amaneceres interrumpidos por las nieblas,
besos apagados por distancias,
esperas que se marchan sin decir a dónde…
Mañana será un día cualquiera,
sentirás la distancia enorme entre lo que se quiere y lo que puedes conseguir,
entre el deseo y la suerte
entre recuerdos de un ayer distante, lejano
y un hoy que empuja
para crear el rincón donde refugiarte
junto a las cosas hermosas que vienen con las estaciones;
o huir… del hastío y la rutina de los nuevos tiempos.
Al final, mañana es mañana.
Y será importante solo porque vives
con la intensidad de un momento que pasa.
Como fueron importantes otros momentos intensos también,
que ya olvidaste…
(Es imposible andar toda la vida
apuntando cada latido de tu corazón)
Por eso a veces basta con un adiós
y unos pasos que se alejan por la escalerilla.