¡No al Decreto 370!

Viernes de Rosalia

Con el aumento del acceso a Internet en Cuba también ha venido el aumento de la vigilancia masiva en línea por parte del Estado. Hecho que vulnera una vez más la libertad de expresión de los cubanos en el ámbito digital, como si no fuera suficiente la carencia de este principio humano a lo largo de medio siglo.

Han llovido las orientaciones y acciones a ejecutar desde diferentes sectores estatales y educativos para contrarrestar las opiniones alternativas que circulan en la red. Esto ha provocado un sinfín de violaciones, desde descalificativos, robos de cuentas digitales, hasta graves enjuiciamientos. Pero ninguna de estas acciones ha podido frenar el deseo y la necesidad de los cubanos a expresar lo que piensan y denunciar lo mal hecho.

Desde los inicios del actual año, en medio de una pandemia que sigue cobrando vidas, el Estado ha agudizado su represión a través del Decreto Ley 370 “Sobre la Informatización de la Sociedad en Cuba”, el cual entró en vigor el 4 de julio de 2019. A casi treinta personas le han aplicado este Decreto, producto del cual han sido amenazadas, han decomisado sus dispositivos y han sido multadas con la escandalosa cifra de 3000 pesos cubanos (120 CUC), cuando el salario promedio de un mes no supera los 1000 pesos.

Es la actual vía de represión a periodistas, activistas de la sociedad civil y hasta ciudadanos neutrales que puedan compartir cualquier información que les resulte molesta. Es el nuevo método para infundir miedo e intensificar el control sobre los ciudadanos.

La Declaración Universal de los Derechos Humanos en su artículo 19 plantea que “Toda persona tiene derecho a la libertad de opinión y de expresión”, derechos que el Gobierno cubano viola constantemente, así como viola su propia Constitución.

A pesar del esfuerzo de los que gobiernan por causar temor con este Decreto, se ha creado una fuerte movilización a favor de derogarlo dentro y fuera de la Isla, donde reconocidas organizaciones internacionales se suman a la petición de medios independientes de anular esta absurda ley que viola la libertad de expresión en línea.

 

 


  • Rosalia Viñas Lazo (Pinar del Río, 1989).
  • Miembro del Consejo de Dirección del CEC.

 

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