En estos días la propaganda en todos los medios estatales de difusión masiva cubanos no ha parado de sacar cuentas y lamentos acerca de las consecuencias del embargo-bloqueo que los Estados Unidos sostienen sobre el gobierno cubano. La frase que más hemos leído y escuchado reiteradamente es “No al bloqueo”. Ya pasó la tradicional votación en la ONU con el mismo balance de las últimas casi tres décadas. El mundo vota en contra del embargo y Estados Unidos e Israel a favor. Estas son las noticias. Resumo mi reflexión en estos cinco puntos:
- El problema principal de Cuba no es el embargo norteamericano. Es la falta de libertad y de democracia para el pueblo cubano.
- Personalmente estoy contra el embargo externo, entre otras razones, destaco la más pragmática: porque hasta hoy ha sido inútil para lograr la libertad en más de medio siglo, aunque reconozco que su origen fue a causa de intervenciones y confiscaciones de propiedades ajenas, sin indemnización ni justicia.
- Creo que la raíz y el centro de los problemas de la economía, la sociedad y la política en Cuba es el modelo cubano, totalitario, estatista, centralizado y bloqueador de la iniciativa privada, que “no funciona ni para nosotros mismos” y que ha demostrado a lo largo de 100 años que no ha funcionado en ningún lugar del mundo.
- Que sobre todo estoy contra este “bloqueo interno” con que el Estado embarga los proyectos de vida, bloquea las iniciativas privadas, reprime a los emprendedores honestos, penaliza la creación y acumulación de riquezas y de propiedades, interviene, confisca, multa y acosa a los cubanos y cubanas que quieren permanecer aquí, emprender aquí, producir eficientemente en su tierra, crear riquezas para Cuba, pagar puntualmente sus impuestos y participar en la reconstrucción de la empobrecida y maltrecha nación cubana.
- No somos los ciudadanos los causantes de nuestros “problemas acumulados”, no es la propiedad privada la que secuestra la iniciativa de los cubanos, no es la riqueza que se crea la que corrompe el País ni empobrece al País. Los problemas que llevan más de medio siglo sin resolución los ha provocado el “bloqueo” que sobre cada cubano impone el modelo planificado desde lo más alto del poder, un sistema económico centralizado, ineficiente y burocrático, y un sistema político que “embarga” la auténtica participación de los ciudadanos, le recorta la ilusión de progreso, le tala cuando ve que crece y se expande y le seca la raíz de la esperanza.
Sabemos que ningún modelo es perfecto. El paraíso no existe en esta tierra. Pero la libertad, la dignidad plena y los derechos de la persona humana deben ser “la ley primera de la República”, según Martí. Otros son los problemas de desigualdades e injusticias que enfrentaremos con el otro modelo pero, por lo menos, criticarlo, intentar cambiarlo y transformarlo, no será penalizado en una sociedad democrática con un poder judicial independiente que subsane la indefensión del ciudadano. Y mejorarían las libertades, la democracia, la inclusión, el emprendimiento y el progreso de los cubanos que trabajen y produzcan.
Estoy convencido, y casi todo el mundo lo sabe, incluidas las autoridades, que este es el pensar de la mayoría de los cubanos, aunque digan y hagan como que no saben.
Los dejo con este trabalenguas:
“Lo que yo sé es que los que sí saben lo que los cubanos sabemos, son los que mejor lo saben.”
Y lo peor es que perseveran en el error de no cambiar lo que debe ser cambiado.
Hasta el próximo lunes, si Dios quiere.
Dagoberto Valdés Hernández (Pinar del Río, 1955).
Ingeniero agrónomo. Premios “Jan Karski al Valor y la Compasión” 2004, “Tolerancia Plus” 2007 y A la Perseverancia “Nuestra Voz” 2011.
Dirigió el Centro Cívico y la revista Vitral desde su fundación en 1993 hasta 2007.
Fue miembro del Pontificio Consejo “Justicia y Paz” desde 1999 hasta 2006.
Trabajó como yagüero (recolección de hojas de palma real) durante 10 años.
Es miembro fundador del Consejo de Redacción de Convivencia y su Director.
Reside en Pinar del Río.
Columnas anteriores
30 octubre 2017│REDESCUBRIR A CUBA
23 octubre 2017│LOS EMPRENDEDORES, ALGO MÁS QUE PEQUEÑOS NEGOCIOS
16 octubre 2017│En Cuba se acumulan los problemas
9 octubre 2017│La crisis y la angustia
2 octubre 2017│La visa o la vida
25 septiembre 2017│Mi barrio, una comunidad de vecinos
18 septiembre 2017│“Un hombre es tan feliz como decida serlo”
11 septiembre 2017│ ¡Esto no es fácil!
4 septiembre 2017 │El silencio: un talento humano
28 agosto 2017 │El “celular”: comunicación o incomunicación
21 agosto 2017 │ ¿Dónde está el verdadero peligro?
14 agosto 2017 │ Las “regulaciones” al trabajo privado y la desconfianza