Entrevista exclusiva con Jesús Puente, una de las voces de Los Muchachitos: dueto alternativo del Hip Hop cubano)
Por Maikel Iglesias Rodríguez
¿Quiénes son Los Muchachitos y cuál es su razón para hacer música?
Somos El Yunior y El Pi-Q, dos jóvenes con deseos de revelar sus penas y sus diversiones mediante la música.
¿Es posible hablar en Cuba hoy, de un movimiento de Hip-Hop auténtico?
Se puede hablar de un movimiento que está latiendo nuevamente, gracias a las verdades que expresan los raperos. Pero no lo considero auténtico del todo, ya que nos nutrimos del Rap norteamericano, español, y de otros países. No obstante tiene su sello, su cosa; muchos de sus exponentes producen sus temas de manera innovadora, cada día son más los instrumentales propios y el flow original.
¿Dónde están sus potencias y cuáles son las piedras que lo frenan? Esas que le aprietan los zapatos y entorpecen su manera de rimar.
La musa no siempre está disponible, a veces sus caprichos nos llevan a hacer temas interesantes, pinchas buenísimas. Pero cuando nos falta, es una odisea escribir una palabra. También es complicado el tema de la promoción, muchos medios subestiman lo que hacemos, arduo es el trabajo para conseguir las producciones de nuestros instrumentales. La Radio, las disqueras y la TV, cierran más puertas que las que se abren. Aún así no nos paramos, conscientes de que hay gente que le gusta y necesita lo que hacemos.
¿Qué diferencia al rap cubano del que se produce en México, Brasil, España, Mali o USA?
El Rap es Rap en el mundo entero. Algunos lo hacen religioso, otros lo hacen bélico, otros pacíficamente, otros al amor. Otros protesta…lo que varía es el idioma, dialectos y costumbres. Lo que importa es que con o sin recursos, el Rap es una verdad inmensa. Sentimiento, Fe, Energía y Libertad.
¿Por qué elegiste un género tantas veces prohibido, censurado, o simplemente marginal, entre otros ritmos autóctonos como el bolero, mambo o cha cha chá? ¿Resultado de la inspiración, un pacto con la moda o el destino?
Quizás en un principio fue una moda, algo para desconectar. Con el tiempo fui juntando ideas, sumando aliento, fluyendo, y es allí donde se encuentra aquello que pudiera definirnos más. Fue como un viaje a algo profundo, a un punto de motivación para mostrar nuestras verdades, compartir cultura, esa cosecha de paz con uno mismo. Tan difícil de lograr en este mundo. A veces fuerte e incómodo el camino, pero vivo a pesar de muchas cosas.
¿A qué grupos te acercas o te has conectado en tus cajas de ritmo, coros, flow y arte de improvisación?
Me baso mucho en las fusiones. Me encanta el resultado de las buenas mezclas. Me influyen grupos del patio como Interactivo, una súper banda que dirige Robertico Carcasés. Aprendo mucho de los beat de los Orichas y Los Ogguere. Son muchos los que influyen en Los Muchachitos. Nos gusta el trabajo que despliegan Black Eyes Peas, Bhusta Rymes, Eminen, Anónimo Consejo, Los Aldeanos.
¿Qué asiento ocupa el barrio en tus canciones?
Mi barrio es la primera plana, de él han salido y saldrán muchos temas, porque está lleno de personajes con vivencias durísimas.
¿Cómo sueñas el futuro del mundo y cuánto te desvela mejorarlo?
Lo sueño al derecho. Mi cabeza es una concretera encendida cada vez que me voy a la almohada, por la imperfección del Hombre.