Migración

Viernes de Rosalia

– Mamá, ¿veremos pronto a mi amiga?

– No creo amor, va a demorar un tiempo.

– ¿Cuánto tiempo?

– Mínimo 3 años.

Y las lágrimas comenzaron a caer en su rostro.

¿Por qué se tuvo que ir a vivir allá? ¿Por qué no podemos ir nosotras a verla? Estas son algunas de las preguntas que se hace una niña al saber que su amiga se fue a vivir a los EE.UU.

La gran ola migratoria que está teniendo lugar en Cuba ahora mismo, trae consigo esto y mucho más. Tuve mucho que explicarle a una niña de 7 años. Su llanto desconsolado por no poder ver a su amiga dentro de un largo tiempo me hizo pensar en los hijos, padres, amigos y familiares que están sufriendo y han sufrido a lo largo de los años esta separación.

Por estos días son muchas las emociones que me inundan, a la par que me llenan de alegría me dan mucha tristeza.  No puedo dejar de entender y comprender las decisiones de amigos y conocidos de emigrar en busca de libertad, en busca de oportunidades y un mejor futuro para los suyos, pero me da tanto coraje que la historia se siga repitiendo y esta Isla se desangre.

Son muchos los jóvenes huyendo de esta miseria y desamparo, sin importar que tan difícil sea la forma ni el camino, transitarlo vale la pena solo por respirar libertad.

Merecemos tener en nuestra Isla esa libertad que es un derecho, y esas oportunidades que tantos se van a buscar fuera.

 


  • Rosalia Viñas Lazo (Pinar del Río, 1989).
    Miembro del Consejo de Dirección del CEC.

 

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