La Universidad de las Ciencias Informáticas (UCI) desarrolló hace aproximadamente cinco meses una aplicación llamada Porter@ con el fin (según explicaron los medios) de ayudar a ordenar las interminables colas que se realizan en las tiendas para la compra de diferentes productos, también para el análisis de contacto de una persona confirmada de COVID-19, y para evitar que los llamados coleros y acaparadores compren en más de una ocasión en las tiendas.
Esta app almacena en una base de datos local en el teléfono el número de carnet de identidad de la persona que entra a comprar a la tienda, una vez que el cliente se registre con su carnet ya no puede volver a pasar hasta el próximo día. Durante este tiempo esta app ha sufrido cambios, permitiendo registrar el producto que se va a comprar y alargando la cantidad de días en los que se pueda volver a comprar.
Ante la actual pandemia del COVID-19 y la crisis económica existente en el país, se han visto en práctica diferentes medidas para controlar las colas dentro de las cuales están la aplicación antes mencionada, la regulación y venta de alimentos y productos de aseo a través de la tarjeta de abastecimiento, y la más actual, una aplicación que registra la imagen de las personas que van a comprar a los establecimientos de ventas.
Han sido muchas las interrogantes ante estas aplicaciones, dado que no se conoce qué personas tendrán acceso a los datos registrados, o con qué fin puedan ser utilizadas estas bases de datos más adelante. Peor aún es la nueva aplicación usada en las colas que obliga a los clientes a ser fotografiados, donde la imagen de las personas queda expuesta en una base de datos en el teléfono de una persona desconocida sin ninguna garantía de qué uso se le dará a esta imagen, más allá de evitar comprar de manera repetida en una cola.
¿Dónde queda el derecho a la privacidad de los ciudadanos? La actual Constitución de la República de Cuba de 2019 plantea en su Artículo 48, que “todas las personas tienen derecho a que se les respete su intimidad personal y familiar, su propia imagen y voz, su honor e identidad personal”. Entonces ¿Por qué surgen “soluciones” que violan estos derechos básicos?
En la provincia de Pinar del Río ya se han puesto en práctica las medidas antes mencionadas. Actualmente se está registrando la imagen de las personas en las colas y resulta indignante tal violación a la privacidad. Presencié en una cola la inconformidad de los ciudadanos ante esta medida, personalmente le pedí a la persona encargada de fotografiarme que no lo hiciera, porque no doy mi autorización para eso, dado que viola mis derechos.
Las soluciones que se presenten a los problemas actuales no pueden estar por encima de los derechos de los ciudadanos, así como deben estar sujetos al debate y aprobación de los mismos.
- Rosalia Viñas Lazo (Pinar del Río, 1989).
- Miembro del Consejo de Dirección del CEC.