Me pasa muy a menudo que veo fotos o videos en redes sociales de personas que he conocido y ya no viven en Cuba. Es increíble la cantidad de personas que cada año emigran en la Isla, a pesar de las disímiles dificultades que enfrentan para su salida.
El éxodo en Cuba viene ocurriendo desde hace muchos años, sobre todo por el sector más joven de la población y la pregunta importante es ¿por qué tantos cubanos piensan en huir de su país? La falta de libertad, de oportunidades, los problemas económicos y la incapacidad de encaminar proyectos de vida, pueden ser las principales causas de dicho éxodo.
El derecho a la libertad de pensamiento y las carencias económicas que han primado durante los años de revolución, han sido siempre los obstáculos principales que han llevado a los cubanos a emigrar. Cuando escucho en los medios de comunicación que los jóvenes cubanos son los más comprometidos con la revolución, me pregunto qué tan conscientes son de la realidad que se vive en la Isla.
Desde que tengo uso de razón he escuchado que muchas personas se han lanzado al mar en balsas para llegar a la otra orilla, donde muchos han perdido la vida. Otros han intentado casarse con extranjeros para conseguir una ciudadanía que les permita vivir en otro país, otros han salido de misión con la idea de emigrar y así diversos ejemplos a lo largo de los años.
Irse del país sigue siendo “la solución” de todos y cada uno de los problemas de los cubanos desde hace más de 50 años. Hoy, a pesar de las dificultades que entraña emigrar a los Estados Unidos por las medidas tomadas por su gobierno nuestros jóvenes siguen buscando vías alternativas y muchas veces peligrosas para arribar a territorio norteamericano.
Termino con dos preguntas: ¿Sería una solución más sensata y coherente quedarse y luchar por una mejor nación? ¿Acaso los cubanos han perdido todas las esperanzas?