Se dio a conocer la información en medios oficiales, de algunas medidas temporales que el Ministerio de Comercio interior adoptó para la distribución de diferentes productos alimenticios y de aseo e higiene en la red minorista, con la intención de regular su distribución y venta.
Muchas personas conocían esta información mucho antes de que se hiciera oficial, dado que circulaba en las redes sociales, y muchos fueron los que la compartían y comentaban al respecto. Desde ese entonces, muchos cubanos nos hemos sentido indignados y nos hemos preguntado ¿qué tan crítico será este nuevo periodo especial que enfrentamos los cubanos de a pie?
En el artículo que leí decía que la distribución del pescado este mes será en todas las provincias del país, excepto en la capital, que ya lo recibieron. No sé si ponerme triste porque se lo vendieron antes a los habaneros, o llorar porque este mes ya no recibirán pescado. También informaron que el pescado “arribó” al país el día 24 de mayo, y me pregunto ¿cómo un país que está rodeado de mar como Cuba no puede garantizar este producto en vez de importarlo?
La distribución de las salchichas por composición de núcleos, cada tres meses, ha dado mucho de qué hablar. Existen núcleos familiares formados por dos hogares diferentes, que por diversos motivos aún no han podido dividir los núcleos y ya están debatiendo cómo dividir las salchichas.
La cifra de 23 productos de la Canasta Familiar Normada, 19 alimenticios y 4 no alimenticios, tiene a los cubanos haciendo cuentas, dado que ese número supera los productos reales que se reciben mensualmente.
Es entendible que en tiempos y momentos críticos exista una regulación de los productos para que el desamparo de los ciudadanos no se agudice. Pero la situación que vive esta Isla es insostenible.
- Rosalia Viñas Lazo (Pinar del Río, 1989).
- Miembro del Consejo de Dirección del CEC.