Por Wilfredo Denie Valdés
Uno de los establecimientos comerciales más concurridos por la diversidad de su surtido lo constituía la tienda “El Fuego” donde los artículos estaban al alcance de su clientela bien seleccionada y los precios a los que se ofertaban, estaban acordes con los ingresos de cualquier humilde ciudadano.
Este establecimiento situado en la calle Martí esquina a Rosario tiene sus antecedentes en una inmensa casona colonial, lugar donde estaban ubicados varios comercios.
El más antiguo data desde el día cinco de agosto del año 1895, conocida como “La Emperatriz” dedicada a ferretería, locería, y cristalería, propiedad de Celestino Elizalde y Guillermina García Perdomo.
El día 4 de febrero de 1899, según el Registro Mercantil de Pinar del Río, parte de este inmenso local pasa a ser ocupado por Felipe Rodríguez y Cía., Sociedad en Comandita, Francisco Palizuela y Muela, Antonio Felipe Rabanal y Antonio Rodríguez Simón. Fue inaugurada en el ramo de ropa y peletería con el nombre de “La Gran Vía”, el 6 de febrero de 1901, quedando como único dueño de la compañía comercial Antonio Felipe Rabanal.
En este período pasa a ocupar una parte de esta casa colonial la barbería de Fariña, que posteriormente se trasladó para la calle Máximo Gómez casi esquina a Vélez Caviedes.
Ese mismo año de 1902, un voraz incendio destruye todos los comercios que se encontraban instalados en dicha casa colonial, es decir: La Emperatriz, Los Altos del Pasiego, y la barbería de Fariña.
Parte de estos establecimientos fueron trasladados a la mueblería perteneciente a Fabián Díaz, situada en la esquina de Martí y San Juan.
El día 14 de Julio de 1903, después de haber construido una nueva edificación de estilo moderno se reabrió el establecimiento, pero con el nombre de “El Fuego”, debido al siniestro ocurrido en ese lugar, dedicado a venta de ropa, peletería, quincalla, sombrerería, sedería, etc., formándose la Compañía de Felipe Busto, Manuel Felipe Rabanal, Manuel Busto García, Enrique Durán Salgueiro y Ángel Fernández.
El 17 de octubre se disuelve la sociedad, quedando como nuevos dueños: Felipe Justo Durán e Higinio Rabanal Álvarez.
Años después “El Fuego” es dedicado a peletería, ropa, librería, cristalería, así como un servicio interno de lonchería, heladería y otras ofertas.
A finales de los años 40 y principios de los 50 este importante establecimiento dirigido bajo la regencia de su dueño Manuel Felipe Migoya, toma la iniciativa de constituir una Sociedad Mercantil Comanditaria la cual distribuía las ganancias en el año, en base a una cooperativa, que además de Felipe Migoya la formaban los empleados de dicho establecimiento: Armando Valdés, Martín Iviricu Oruña, Néstor Ferro, Bernardo Oriol Sánchez, Armando de la Cruz Alonso, Pedro Prieto Díaz, Orlando Valdés de la Campa y Alonso Ferreiro.
Con los fondos adquiridos de la mencionada Cooperativa, Martín Iviricu Oruña, adquirió y remozó el establecimiento conocido como la tienda “Sensación” uno de los más concurridos de la ciudad. Por otra parte Orlando Valdés se ubica en la propia calle Martí con el establecimiento “Radar Peletería” y los demás socios de la Cooperativa “El Fuego” obtuvieron suficientes recursos que dedicaron a otros negocios.
La Cooperativa “El Fuego” es un ejemplo de la distribución de ganancias de sus empleados que con el propio trabajo individual de propiedad colectiva pueden adquirir dividendos para resolver sus problemas financieros, convirtiéndose en propietarios con esfuerzos propios, dentro de una sociedad de libre comercio.
Wilfredo Denie Valdés (Pinar del Río, 1926)
Periodista. Lic. en Historia.
Historiador de la ciudad durante mucho tiempo.
Fundador del Movimiento 26 de Julio en su provincia.
Director del Instituto de Amistad con los Pueblos en P. del Río.