Carta de un ciudadano a Pedro de La Hoz a propósito de su artículo del 2 de febrero de 2010 en el periódico Granma.
Pinar del Río, 4 de Febrero de 2010
Señor Pedro de La Hoz:
El pasado día 2 de febrero leí en el diario Granma su artículo que tituló: “Los Van Van contra la intolerancia”, donde nos contaba las innumerables muestras de afecto que recibió la popular orquesta cubana en la ciudad de Miami y también el rechazo que causó en algunos sectores de cubanos exiliados.
El intercambio cultural entre los dos países, después de tantos años de intolerancia, de ambas partes, es un gran paso de avance en el posible restablecimiento de las relaciones entre las vecinas naciones. Pero me pregunto: ¿podrá existir un verdadero intercambio cultural si no dejamos que las heridas cierren?
Muchos cubanos de Miami están disfrutando de Los Van Van por estos días, otros no; tienen la libertad de no hacerlo y de expresar su descontento, sin embargo, allá en los EEUU están los Van Van, estuvo David Calzado y su Charanga, y han viajado otros más con el objetivo de promover un intercambio fraterno entre artistas, esto, estimado periodista, es lo que los cubanos deben conocer.
Si de intolerancia vamos a hablar, señor de La Hoz, recordemos que al finalizar el pasado año y sin saberlo la gran mayoría de los cubanos, se le negó la entrada a nuestro país al cantante cubano Willy Chirino, después de una solicitud formal que le hiciera a nuestro señor presidente. Le puedo asegurar, amigo mío, que serían muchos los que hubiesen ido a disfrutar su concierto en la pantalla de La Piragua. Si de intolerancia vamos a hablar, ¿cuántos actores, cantantes, músicos que eran de nuestra preferencia, hemos dejado de ver, porque simplemente decidieron ser libres y recomenzar su vida en otro país? ¿Acaso no es intolerancia no difundir por los medios de comunicación la música de Los Aldeanos, Escuadrón Patriota y otros artistas cubanos de mucha calidad?
Para que exista una fraterna convivencia, señor, debemos trabajar todos. Es muy particular mi opinión de que los periodistas, como constantes portadores de la noticia, deben trabajar en función del acercamiento entre las personas, y no, de promover odios que ya fueron estratégicamente inculcados.
Dios permita que muy pronto, se terminen los viejos odios y podamos disfrutar en nuestro país de artistas cubanos, que por intolerancia del lado de acá, no nos pueden brindar su arte.
Mis respetos para usted.
Sironay González Rodríguez.
San Cristóbal, Pinar del Río