Después de un largo y difícil año, llega la Navidad, hermosa fecha para celebrar en familia aún en los momentos más difíciles. La celebración de la Nochebuena es una tradición mundial, que viven tanto los católicos como los que no lo son. A pesar de la pandemia, muchas familias han hecho lo posible por estar unidas y compartir este bello momento, porque la celebración del nacimiento de Jesús es una fecha que nos colma de amor y esperanza.
La actual situación que enfrenta el país ha propiciado que la búsqueda de los alimentos y preparativos para la cena navideña sea muy difícil. Buscando de un lado a otro, encontrando algunas cosas a precios exorbitantes y otras imposibles de conseguir. Si bien lo más importante de esta celebración no son los adornos, ni la cena en sí, a las familias les gusta reunirse a gusto después de un largo año de trabajo.
Muchas familias no pudieron tener en su mesa carne de cerdo, ni vegetales, ni turrón, ni los tan deliciosos dulces en almíbar a los que nos acostumbraron nuestros abuelos, todos estos platos típicos en la celebración. Cada año es más difícil que el anterior. Cada año está cargado de más escasez y preocupación para los cubanos.
Aun en tanta adversidad el regalo de la vida es el más grande, las risas espontáneas de los más chicos de casa y el cálido abrazo de nuestros mayores nos reconforta. Esta fecha nos llena de esperanza y dicha y nos anima a continuar.
- Rosalia Viñas Lazo (Pinar del Río, 1989).
- Miembro del Consejo de Dirección del CEC.