Wilfredo Denie
Entre tantas aplicaciones de la electricidad, el teléfono es una de las que más profundamente han transformado las relaciones de los hombres. Este aparato hace posible la vida en las grandes ciudades modernas, donde los más complicados asuntos se resuelven muchas veces sin necesidad de que las personas se reúnan, sin que se vean ni se hablen cara a cara. Basta que hablen por teléfono. Y no solo esto: las personas que viven alejados una de otras, incluso en países y continentes distintos, pueden ponerse en comunicación, hablar y decidir cuestiones, a veces de vital importancia en breve tiempo y sin que ninguno de ellos tenga que verse precisado a abandonar su residencia para hacerlo.
Este revolucionario invento llegó a cristalizarse en 1876 por el físico y electricista norteamericano Alexander Gradhan Bell (1847- 1922). El aparato telefónico transmite a larga distancia la palabra y toda clase de sonidos por la acción magnética. En 1878 se inaugura en New York la primera central telefónica.
Diez años después, o sea, el 30 de noviembre de 1888 se dio permiso para establecer el servicio telefónico en La Habana. En el año 1909, bajo la firma de Havana Telephone Co. Contando con 3989 abonados, usando el aparato del sistema antiguo. En esa fecha no existía el servicio de larga distancia. Ya en 1910 abarcaba todo el país y con el mundo entero, operado por la Cuban Telephone Co. con la inauguración de la primera planta. (Ver diagrama que indica el aumento de teléfonos conectados al sistema de la Cuban Telephone Company desde septiembre 10-1909 hasta septiembre 30-1914), que alcanzó la cantidad de 17400.
En 1921 se logro un puesto preferente en la comunicación al establecerse el servicio telefónico entre Cuba, Estados Unidos y Canadá. Quedaron inaugurados los cables submarinos más largos y de mayor profundidad conocidos en La Habana. Con los más importantes trasatlánticos en el mar se comunico con el mundo, incluyendo a Oceanía.
¿Cuándo llega el teléfono a Pinar del Río?
Con fecha dos de enero de 1901, según aparece en las Actas Capitulares del Ayuntamiento de Pinar del Río, se dio cuenta con un informe de la Comisión de Policía Urbana y Rural emitido a virtud del escrito presentado por el señor Oscar Cuní Téllez solicitando concesión de permiso para instalar una red telefónica en el término de Pinar del Río. Se acuerda por el Ayuntamiento que este escrito quede sobre la mesa para su estudio.
El 20 de febrero de 1901 el Ayuntamiento vuelve a tratar la solicitud de Cuní Téllez y se acuerda darle el derecho para establecer y explotar líneas telefónicas en todo el territorio municipal, así como en cabeceras que podrá ser unida con la de otros municipios con arreglo y sujeción a las bases que acompañan el escrito firmado por la Comisión de Hacienda. Entre las obras se plantea la nueva red telefónica que contará con su trasmisor, un receptor, campanillas y accesorios para su montaje.
Inmediatamente la red telefónica comenzó su trabajo de montaje de los postes con sus correspondientes cables y accesorios para dotar por primera vez al municipio de Pinar del Río de este importante servicio, incluyendo la periferia de la ciudad; su población crecía lentamente, aunque contaba con un comercio en pleno desarrollo y sus habitantes para disfrutar de este gran acontecimiento.
La primera oficina de la red telefónica fue ubicada en la casona de dos plantas, que permanece en el mismo lugar llamada de Las Tullerias, situada en la calle Vélez Caviedes detrás del hotel “Comercio” en la calle Vélez Caviedes entre Máximo Gómez y Martí. Esta edificación centenaria está apuntalada con peligro de derrumbe.
Ya en el año 1914 según el Directorio Telefónico que se edito en Cuba, Pinar del Río contaba con 275 teléfonos pero bajo la dirección de la Cuban Telephone Co. (Ver parte de relación de teléfonos instalados en Pinar del Río que aparece en el Directorio Telefónico de Cuba y la tarifa de larga distancia).
En aquel entonces la red telefónica fue trasladada para la calle Martí número 52, lugar donde se encuentra “La Quincallera”.
La Cuban Telephone Company abarcaba toda la provincia desde el año 1914. Las comunicaciones comenzaron a extenderse a todos los rincones de la provincia pinareña.
La planta matriz fue construida en el año 1929, siendo inaugurada el 29 de abril con la asistencia de las clases vivas de la provincia encabezadas por el doctor Juan María Cabada, alcalde de Pinar del Río. Allí se mantuvo hasta la terminación de la nueva planta situada en la Avenida de la Alameda.