Es conocida la crítica situación de desabastecimiento existente a lo largo de la Isla. El 2020 ha comenzado arrastrando los serios problemas del año anterior, desafortunadamente no puede ser de otra forma mientras la raíz del problema no se solucione.
En la provincia más occidental del país hay una fuerte inestabilidad con los productos de primera necesidad. Recién ayer se inauguró en Pinar del Río un nuevo mercado en donde estuviera anteriormente “El bambi”, un atelier de la ciudad.
A través de los cristales del local se podían observar diversos productos como detergente en polvo, papel sanitario, escobas, leche condensada, malta Bucanero entre otros desaparecidos por estos días, por lo que desde el día anterior a su apertura muchos ciudadanos sabían que amanecerían haciendo una larga y extenuante cola. Así mismo sucedió. Los alrededores del local repletos de personas y agentes del orden público presentes para organizar la cola y prever disturbios. Es muy común encontrar policías en zonas de ventas, dado que la crisis tiene los ánimos muy caldeados.
Hace poco tiempo en el centro de la ciudad se reajustaron algunas tiendas recaudadoras de divisas y se crearon tres mercados, los cuales actualmente cuentan con espacio suficiente para la venta de los productos antes mencionados, sin la necesidad de crear uno nuevo, el cual al siguiente día, también estará vacío. Se puede observar como un mismo producto se repite hasta el cansancio, para que los estantes no se noten vacíos. El local recién estrenado está en la misma calle Martí, incluso en la esquina de uno de los tres antes mencionados, por lo que no tiene mucho sentido. ¿Será la apertura de un mercado la solución a la carencia y desabastecimiento que sufre la provincia? Personalmente, no lo creo.
- Rosalia Viñas Lazo (Pinar del Río, 1989).
- Miembro del Consejo de Dirección del CEC.