Jueves de Yoandy
A veces los cubanos pensamos que solo en Cuba, es decir, dentro de la Isla, se puede vivir el patriotismo o se conoce mejor la historia del país.
Desgraciadamente no es así. La ideología ha colmado tanto la historia de los pueblos que es muy lamentable encontrar a nacionales que desconocen los orígenes o aborrecen el acervo histórico. Luego nos podemos encontrar con algún cubano del exterior que ha llevado en su maleta un pedazo de tierra cubana y en su corazón todo el acervo patrio. Es la prueba de que, a pesar del dolor del desterrado vence el amor del patriota. El amor siempre nos convoca y nos une.
Por estos días he tenido la oportunidad de compartir con un grupo de cubanos que me han dado una lección de vida: la memoria cubana se conserva, sí, se conserva a Cuba en el corazón.
Visitar algunos de los lugares que recuerdan a José Martí en la ciudad de Tampa: el hotel “El pasaje” donde sufrió el atentado. “El Parque de los Amigos de Marti” que lleva su nombre y su estatua en el mismo lugar que estaba la casa de los Pedroso, la familia que lo cibijó después del atentado. La famosa escalera de la tabaquería donde se fotografió Martí con aquellos que apoyaron su labor apostólica por la libertad.
También disfrutamos de la sabia y patriótica explicación detallada del que fuera Director del Club Cubano de Tampa, en un recorrido por los salones de esta institución cultural fundada en 1917 por los cubanos que habían en esta Ciudad.
Visitar los lugares donde vivió y predicó José Martí. Caminar por las mismas calles de Ybor City ha sido lección y reavivamiento de mi amor a Cuba y a sus raíces históricas.
Pero aún más lo ha sido el intercambio con nuestros compatriotas y la constatación de que Cuba vive también en sus mentes y corazones y con tal pasión que a veces nos parece que es más fuerte ese amor, quizás por la distancia del largo destierro.
Cuba es una nación que respira, vive y ama con dos pulmones: la Isla y la Diáspora.
Cuba necesita cada vez más de los dos pulmones y reconstruir nuestra Nación con un mismo corazón y uniendo voluntades.
Yoandy Izquierdo Toledo (Pinar del Río, 1987).
Licenciado en Microbiología por la Universidad de La Habana.
Máster en Bioética por la Universidad Católica de Valencia y el Centro de Bioética Juan Pablo II.
Máster en Ciencias Sociales por la Universidad Francisco de Vitoria, Madrid, España.
Miembro del Consejo de Redacción de la revista Convivencia. Responsable de Ediciones Convivencia.
Reside en Pinar del Río.