Libertad, acceso y empoderamiento

Martes de Karina

Cuba asume la presidencia de la CEPAL por los próximos 2 años. Es una buena oportunidad para convertirse en un país de referencia en materia de cambios graduales y pacíficos hacia la democracia económica y política.

El discurso pronunciado por el nuevo presidente cubano Miguel Díaz Canel Bermudez en la inauguración del XXXVII período de sesiones de la CEPAL, destaca por varias frases que no contradicen lo que una gran parte de los cubanos, que no estamos de acuerdo con el sistema económico y político en que vivimos, deseamos para nuestro país. Por ejemplo:

–  «No habrá desarrollo sin paz, ni paz sin desarrollo»

Si seguimos en esta lógica, podemos decir que Cuba no vivirá en paz hasta que alcance cierto nivel de desarrollo. Según el premio Nobel de Economía en 1998, el indio Amartya Sen, el desarrollo solo puede alcanzarse en libertad: El desarrollo puede concebirse como un proceso de expansión de las libertades reales de las que disfrutan los individuos.

Si queremos lograr la paz, debemos buscar el desarrollo y este solo lo conseguiremos con el máximo de libertades económicas, políticas y civiles. Esto es lo que necesitamos los cubanos y otros pueblos de América Latina. No hay paz sin desarrollo, ni desarrollo sin libertad, pudiéramos acotar.

La distribución de los ingresos y las riquezas constituye el elemento central para cerrar esa brecha y para ello ha de garantizarse por parte de los estados el acceso a la alimentación, al trabajo, a la educación de calidad, a la salud, la cultura y a mejores condiciones de existencia.

El Estado cubano debe trabajar en garantizar el acceso a la alimentación y al trabajo de cada vez más cubanos. Es de suponer entonces que el Estado cubano creará las condiciones para que los cubanos podamos trabajar o invertir según nuestras potencialidades y no tengamos que ir a otros países para dignificar el nivel de vida. Es de destacar que no habló el presidente cubano de que la culpa es de los que tienen más, sino de los estados que no han hecho todo lo posible por garantizar el acceso a mejores condiciones de existencia. Necesitamos los cubanos acceso a la alimentación saludable, al trabajo justamente remunerado, a la educación que elijamos, a la salud, incluyendo medicamentos, técnicas y procedimientos que necesitemos para diagnósticos certeros, condiciones de hospitalización, etc., a la cultura en todas sus manifestaciones. Acceso es posibilidad real.

– “Será fundamental tratar de eliminar la diferencia entre ‘los que saben’ y ‘los que no saben’, entre el conocimiento y la ignorancia.”

Esperamos nuevas aperturas al mundo de la tecnología y de Internet, que es la mayor concreción de acceso al conocimiento en la actualidad. El conocimiento es algo que también ansiamos los cubanos y, para ampliarlo necesitamos la información. Una mayor apertura a la información es la que asegurará mayor acceso al conocimiento de los cubanos y por tanto un empoderamiento que todos queremos. La información es poder y elimina una importante diferencia social.

Lo que el presidente cubano menciona en su discurso son solo los fines. Es importante que se vayan mencionando también los medios de los que se valdrá para lograrlos.

Siendo fiel a este discurso, el nuevo gobierno cubano se esforzará en aumentar las libertades, las posibilidades de acceso a un nivel de vida superior y en el empoderamiento del pueblo cubano a través de la información y el conocimiento. ¿O no? Sería un buen programa al que difícilmente alguien que quiera el bien de Cuba, se opondría.

 


Karina Gálvez Chiú (Pinar del Río, 1968).
Licenciada en Economía.
Fue responsable del Grupo de Economistas del Centro Cívico.
Es miembro fundador del Consejo de Redacción de Convivencia.
Reside en Pinar del Río.

 

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