LA GUERRA ES UN NEGOCIO  

Miércoles de Quintana

Un famoso militar construyó esta frase para la posteridad: “La guerra es la continuación de la política por otros medios”. Me gustaría transformarla de este modo: La guerra es la continuación de los negocios por medios salvajes. Incluyo a la geopolítica en el concepto de negocio.

Toda la incalculable destrucción de bienes materiales producida por la contienda en Ucrania es el negocio de la guerra. Centenares de empresas fabrican los repuestos para sustituir lo que las bombas destruyen. Decenas de planificadores filisteos preparan los proyectos de la “reconstrucción” de las naciones en pugna. Los bancos afilan sus intereses. Todo será rehecho, excepto las vidas humanas sacrificadas a Tanátos. Todo, excepto, también, las cicatrices de la memoria.

Más de 13 mil y quizás hasta 25 0 50 mil muertos ha “producido” hasta ahora la guerra en Ucrania. No hay exactitud. Aun la discreción militar opaca la transparencia de los partes de los frentes de combate. Aun los caídos son números aproximados de forma tendenciosa. Pero hay otros casi muertos. Me refiero a los refugiados. Unos dicen que suman 2 millones y medio; otros, que 7 millones la cantidad de personas que han ido a parar a …. cualquier parte…. al infierno del desplazamiento de masas humanas debido a la guerra. La destrucción de millares de viviendas arrasadas por los bombardeos se valora en 39 mil millones de dólares. El valor de la infraestructura destruida, es decir, carreteras, líneas férreas, puentes, puertos, etc., se estima, hasta hoy, en 104 mil millones de dólares. Y los combates continúan. No hay tregua. No hay solución a la vista, ni diplomática ni militar. Hay guerra para rato. Lo que pide Rusia no le será concedido por la OTAN (Organización del Tratado del Atlántico Norte) a menos que ocurra un milagro. Rusia pide:

  • La neutralidad de Ucrania (pactada, escrita)
  • Crimea como parte de la Federación Rusa.
  • Donetsk y Luhansk como estados independientes.
  • Rusia no renunciará a estas seguridades.

Mientras tanto, el quinto jinete del Apocalipsis, la inflación, recorre el mundo en buena medida debido a la guerra en Ucrania. Esa inflación se agrega a la que padecemos los cubanos debido a otras causas y ejercita su poder evaporizador sobre los ingresos de los financieramente vulnerables. Hasta pronto.

 


  • José Antonio Quintana de la Cruz (Pinar del Río, 1944).
  • Economista jubilado.
  • Médico Veterinario.
  • Reside en Pinar del Río.
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