Revista Vitral No. 68 * año XII * julio-agosto de 2005


NUESTRA HISTORIA

 

EL HOSPITAL ANTITUBERCULOSO

WILFREDO DENIE VALDÉS

 

A Roberto Koch, prestigioso médico y bacteriológico alemán se le debe el descubrimiento del basilo patógeno del cólera y el de la tuberculosis, que lleva su nombre (basilo de Koch).
La ciencia médica agradece a Koch ese meritorio descubrimiento. Basta recordar sus estudios sobre la septicemia, la peste bubónica, el paludismo, el cólera, la enfermedad del sueño y sobre las técnicas bacteriológicas. Por sus méritos en el campo de la medicina este científico obtuvo el Premio Nóbel.
La provincia pinareña no estuvo ausente en la tenaz lucha librada en todo el mundo por erradicar la enfermedad de la tuberculosis. Con ese fin, el jueves 27 de mayo de l948 se inauguró, con toda solemnidad, el Hospital Antituberculoso “Pilar San martín”, emplazado en el kilómetro 18 de la carretera a Luis Lazo en el lugar conocido por Guanito y cerca del pintoresco valle Isabel María. Asistieron a la ceremonia de inauguración funcionarios del Ministerio de Salubridad y Asistencia Social, así como autoridades civiles y militares de la provincia y el municipio pinareño.

El Hospital Antituberculoso
“Pilar San Martín” (Guanito 1978).

El hospital, de dos plantas, fue concebido para el tratamiento de la tuberculosis, ocupa una superficie de 3 149,21 metros cuadrados y capacidad para 80 camas, construido en uno de los lugares más altos de esta zona, dentro de numerosos pinares que lo circundan, brindaba a los enfermos aire puro, sano y acogedor para su recuperación.
El hospital contaba con un buen sistema de transporte para los enfermos y familiares.
Esta importante edificación se construyó a un costo de 1,400,000 pesos, equivalentes en aquellos años en Cuba al dólar américano. La construcción es de mampostería, estructura monolítica y piso de terrazo (granito)
Por otra parte el presupuesto del Hospital Antituberculoso “Pilar San Martín”, ascendía a la cantidad de 130, 678. 00 pesos, desglosado de la siguiente forma:

45,470.00…………..Personal facultativo.
31,370.50…………..Personal administrativo.
35,587.50…………..Alimentación para enfermos.
18,250.00…………..Alimentación para empleados.

No se contemplaba en el presupuesto otros gastos en las atenciones generales del Ministerio de Salubridad y Asistencia Social, tales como alumbrado, teléfonos, transportes, etc…

La distribución interna del hospital era la siguiente:
Planta baja: Servicios generales, departamento de consultas generales, vestíbulo, electrocardiograma, metabolismo basal, fisioterapia con aparatos de luz alpina y electricidad, departamento central con rayos X, equipos de 250 miliámpulas y aparato de fluoroscopía con autodiagrama, oficina para el personal administrativo, despacho de la dirección, comedor para empleados, cocina, almacenes, lavandería, garajes, la morgue, barbería, peluquería y conserjería.
El centro contaba con cuatro carros termos para el servicio de los enfermos, una ambulancia, un carro tipo pick up, un camión y un automovil.
Planta alta. Se encontraban las salas de enfermos, con una amplia galería de cura y la unidad quirúrgica, las habitaciones para tres pacientes cada una, con sus respectivas terrazas donde permanecían la mayor parte del tiempo, dos espaciosos salones de operaciones, dotados con todos los adelantos de la ciencia, y planta eléctrica para el caso de que fallara la corriente por mera casualidad, además de, el departamento de enfermeras, de neumotorax y atención médica, el departamento de especialistas en gastroenterología, urología y fluoroscopía. Todos los muebles estaban pintados de gris plata
Se contaba, además con intercomunicadores en cada habitación y un radio receptor para su esparcimiento, así como una lavandería con equipos modernos de esterilización de ropas y útiles sanitarios para enfermos. Así mismo, los enfermos se recreaban con distintos juegos de dominó, parchís y otros.
Alrededor de los años l954-1955 el Hospital Antituberculoso “Pilar San martín” fue ampliado con una tercera planta corrida que permitió alojar en total a 150 enfermos, elevándose el costo de la construcción a más de 2, 000, 000 de pesos, así como un aumento considerable del presupuesto para brindar un mejor servicio.
El primer director del hospital fue el Doctor Juan Mencía Arrondo, quien fue sustituido en l955 por el Doctor Alberto Sánchez de Fuentes, quien permaneció en ese cargo hasta el año 1959.

Vista del hospital antituberculoso cuando
se levantaba la tercera planta. (1954-1955).


Trabajaban como médicos, entre otros, Reinaldo Valdés Hernández, Juan José Font, López del Álamo, Julio Fuentes Blanco, Antonio de la Torre, Luis Regal, Como enfermeros Amparo Guerrero, Onelia Hernández y otros.
En la entrada del hospital se develó una placa en reconocimiento al cosechero de tabaco Liduvino Vizcaíno por sus meritorios aportes que desinteresadamente brindó al hospital.
A partir del año 1959 la dirección del gobierno realizó el traslado de los enfermos para el hospital “La Esperanza” y Topes de Collantes y otros fueron enviados a sus hogares.
A mediados de la década del 60 del siglo pasado, el hospital Antituberculoso “Pilar San Martín”, fue dedicado a hospital de Psiquiatría, desapareciendo posteriormente, quedando la construcción sin ningún tipo de utilidad pública.
Es inconcebible que tan magna obra, que otrora, jugó un papel fundamental en el desarrollo de la medicina pinareña, como institución concebida para salvar vidas, se encuentre abandonada y “canibaleada”, al libre albedrío ¿a quién podemos responsabilizar de este lamentable desastre?


 

Revista Vitral No. 68 * año XII * julio-agosto de 2005
Wilfredo Denie Valdés
(
San Luis. Pinar del Río)
Licenciado en Historia. Fue Historiador de la ciudad de Pinar del Río durante muchos años.