DILEMAS
DE LA PRÁCTICA MÉDICA
CASO
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Una
joven de 18 años de edad sufre un accidente con una
lesión cerebral marcada. Se ingresa en terapia intensiva
y los médicos la atienden. Tres días más
tarde no hay mejoría y se plantea la posibilidad de
que se encuentre en muerte encefálica. Se le realizan
los estudios como está establecido y se llega a la
conclusión de que se encuentra en muerte cerebral irreversible,
no hay ninguna posibilidad de recuperación, aún
le late el corazón y la presión y el pulso se
mantienen dentro de lo normal aunque ya tienden a disminuir,
respira con un equipo de ventilación artificial y se
le plantea entonces a los familiares esta situación,
quedando ellos convencidos de que no hay posibilidad de recuperación.
Entonces se les dice que existe la posibilidad de que puedan
donar los órganos de la paciente y así salvar
varias vidas de personas que esperan por un transplante y
que de no realizárseles morirían.
Los
familiares están de acuerdo, pero uno de ellos, muy
cercano plantea que esperen a que el corazón le falle,
entonces se le explica que el deterioro que se produce en
los órganos por la falta de oxígeno después
de un paro hace que estos no sean útiles para transplantar;
que esto debe hacerse antes del paro. El familiar pregunta
¿Está ya muerta? La respuesta es "Sí,
aunque le lata el corazón, la muerte encefálica
no tiene solución". El familiar entonces pide
que ya que está muerta se le retiren todos los equipos,
que él no está de acuerdo en donar, pero que
si está muerta se la den ya, y si no pueden hacerlo
es porque no está muerta, y entonces ¿Por qué
le piden que done órganos?
¿Qué
usted cree?
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Como habíamos
acordado hoy traemos las conclusiones del primer caso de A Debate
. Ante todo quisiera agradecer a todos los que hicieron llegar sus
respuestas, tanto por escrito como los que se me acercaron para
plantearlas oralmente.
En el caso
a discutir existen tres posiciones, que podemos resumir de la siguiente
forma:
a- "Mato a mi padre porque está sufriendo y quiero aliviarlo,
pero sé que la enfermedad que tiene es mortal y por ello
decido aliviarlo con la muerte".
Esto se denomina "muerte por piedad" y su nombre abreviado
es EUTANASIA. La eutanasia consiste en darle muerte a una persona
aquejada de una enfermedad mortal con el pretexto de aliviarlo en
el sufrimiento y con la justificación de que "como de
todas formas va a morir, acortemos la vida para que sufra menos".
Me pregunto ¿quién sabe cuándo va a morir?,
¿quién tiene derecho a decidir cuándo otra
persona debe vivir o morir?, ¿quién es dueño
de su propia vida o de su propia muerte?.
La respuesta que tengo para esto es: NADIE, solo Dios, y no tenemos
derecho a suplantarlo. La vida nos fue dada en usufructo, no en
propiedad y por ello debemos administrarla y cuidarla, no tenemos
derecho a destruirla. Ninguno de los lectores que opinaron estuvieron
de acuerdo con esta posición, lo que considero muy bueno.
b- "No
quiero que maten a mi padre, quiero que le prolonguen la vida todo
lo posible, que no lo alivien si esto representa la posibilidad
de que pueda acortar su existencia aún en unos minutos".
Esta fue la opinión ligeramente mayoritaria, 56%. Representa
una posición respetable y positiva, es la defensa de la vida
más allá de cualquier consideración, pero tiene
como inconveniente que prolonga el sufrimiento y la agonía
de manera innecesaria.
El sentido del sufrimiento no es soportarlo, sino aceptarlo, pero
no olvidar nunca la necesidad de aliviarlo, tanto físicamente
como con el apoyo humano necesario para que el que sufre sienta
que lo quieren. El mantener la vida con medidas extraordinarias
cuando ya sabemos que estas medidas solo lograrán prolongar
la agonía no conservar la vida, recibe el nombre de DISTANASIA
(dis: dificultad, tanatos: muerte) ya que entorpece el tránsito
natural hacia la muerte sin evitarla. También se la denomina
"encarnizamiento terapéutico", ya que con el tratamiento
que prolonga la vida que ya se va a perder, lo que hacemos es encarnizarnos
con el paciente y no ayudarlo.
c- La tercera
posición: "Sé que la vida ya no existe y quisiera
que muera aliviado, no quiero que se tome ninguna medida que deliberadamente
acorte el tiempo que la queda, pero, dentro de lo moral, no quiero
que sufra".
Este concepto de aceptar la inevitabilidad de la muerte, procurando
hacer lo más fácil posible el tránsito de la
vida hacia la muerte, es la posición más razonable,
Pudiera confundirse con la anterior, la diferencia radica en que
en este caso se emplean medicamentos para aliviar el dolor, aún
cuando estos medicamentos entrañen el riesgo de acortar la
vida, pero para ello es necesario hacerlo con criterios bien claros
y firmes:
1- No buscar la muerte del que sufre, sino su alivio.
2- No utilizar dosis tóxicas de los medicamentos, sino emplearlos
siempre dentro de las dosis de tratamiento recomendadas, si a estas
dosis se acelera la muerte, este efecto no ha sido buscado ni deseado,
la utilización de estos medicamentos a dosis dañinas
es buscar la muerte, pero si el efecto de daño se produce
a dosis habituales, es aceptable. La muerte a su tiempo, ni antes,
ni después. Esto se denomina ORTOTANASIA (orto: tiempo, tanatos:muerte)
En la encíclica
Evangelium vitae, Juan Pablo II señala: "...Si pueda
ser digno de elogio quien acepta voluntariamente sufrir renunciando
a tratamientos contra el dolor ... es lícito suprimir el
dolor por medio de narcóticos, a pesar de tener como consecuencia
limitar la conciencia y abreviar la vida, si no hay otros medios
y si en tales circunstancias, ello no impide el cumplimiento de
otros deberes religiosos y morales"
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