septiembre-octubre.año2.No.9.1995


MEMORIA

CULTURAL

ORQUESTA "CASA CAPÓ"

DEL AYER MUSICAL

por Adalberto Cabrera Espinosa

 

Estamos en deuda con muchos estimados afectos, unos viven, otros fallecidos, todos nos honraron con su amistad, su trato, emociones recíprocas, idénticos entusiasmos en pro de la cultura pinareña y en especial con un total desprendimiento por el auge de la música en Vueltabajo.

Si escrutamos en ese pasado encontraremos los esfuerzos y la dedicación del doctor Juan Montagú Garecabe, médico barcelonés que en la década del 70 del pasado siglo XIX se estableció en nuestra ciudad capital y constituyó el primer conservatorio de música, arte por el que sentía especial vocación y admiración .

Así, en unión de otros distinguidos profesores, formó toda una generación de músicos, que siguieron sus pasos y a la vez, constituyeron otros conservatorios. Las crónicas de aquellos tiempos reseñan las actuaciones en los muy populares bailes de bandos: el azul cubano, el rojo, español y sus esperados recorridos por la calle Mayor -hoy Martí-, y los bailes en el salón del teatro Lope de Vega donde alternaban las orquestas "La Constancia" de los hermanos Pablo y Alberto Gigato; la de los hermanos Sigaray-Juan y Norberto-; " El sinsonte vueltabajero" y la del español Manuel Gómez Laborda.

Esas mencionadas agrupaciones musicales hacían las delicias de sus múltiples seguidores y bailadores, con sus repertorios integrados por los ritmos de entonces, el vals, minuet, one-step, danza, contradanza, el gallop y otros. A principios del cursante siglo se constituyeron indistintamente las orquestas dirigidas -por Juan-Cuco-Jardín, Javier Reinoso y otras que más adelante consignaremos.

Antes, permítasenos recordar que en la época del cine silente, se encargaba de musicalizar las películas que se exhibían en el teatro "Milanés" una agrupación integrada por Ángel Romero-Mongo Callaba-sastre y flautista, su esposa Guillermina Valverde, Inocencio Serrano Lagardere, Fernando Sánchez -el sastre- y otros de la citada época. Las películas eran silentes, con posterioridad surgió el vitaphone y el movietone que significaron avances en la industria cinematográfica, inaugurados por los empresarios Valcárcel y Navas en dicho coliseo el 13 de septiembre del año 1930.

En 1918 surge la orquesta del maestro Emilio Dueñas, que gozó de gran popularidad; la del maestro Javier Reinoso; "La Aurora", de Nemesio Márquez, Alfredo Méndez, Jacobo González Rubalcaba, Luis Frontela, Fernando Sánchez -el barbero-, Severiano Ruiz Paniagua; "La Estudiantina", la del maestro Manuel Alonso Sarabia; Hermanos Iglesias, la primera charanga fundada en nuestra ciudad en el año 1927 con su cantante Dora Díaz; Juan Oruña Macho Gómez; orquesta Atenas Occidental, Pablo Curbelo-Vigoa-; "Ases del Ritmo" de Pedrito Ruiz; Tony Chávez, Yamilé con posterioridad; -Rolando Luis y su orquesta; 'Los Caciques" de Sergio Pérez Canillo, con Mercedes González como vocalista; la orquesta "Casa Capó", bajo la dirección del bajista Mario González Zayas; Nico Suárez "El Galán" y su típica; la Montecarlo, con posterioridad la Metropolitana, dirigida por José Antonio González Camejo; -Ñico Rubalcaba, el jazz band "Occidente" que dirigía el maestro Jacobo González Rubalcaba-, "Ritmo y Melodía" de Joseito González Piloto; la de Pascual R. Díaz-Felito-, Agapito Pérez; los Hermanos; Yiyo Gómez, un afamado trompetista artemiseño, que gozaba de gran popularidad en la provincia; Natividad Díaz y la orquesta "Los Tres Hermanos" de Pilotos, los hermanos Rafael y Zacarías Alfonzo; Angelito González y su orquesta "Danubio Azul" con Dora Díaz como vocalista, Venancio Lugo -el barbero-; típica "Polar", de Joaquín Ortiz Sánchez -el Niño-; "América" bajo la dirección de Guillermito Rubalcaba; Angélico Ortiz y su típica, "Cuba" de Alberto Chirino, "Juveniles del Chá", bajo la dirección del flautista Policarpo Tamayo, Raúl Parra, Francisco Arozarena, y otros músicos, que con cierta periodicidad amenizaban fiestas con agrupaciones conformadas al efecto.

En cuanto a agrupaciones soneras, marco la pauta el Septeto "La Elegancia" que dirigía Nardo Calderín y patrocinaba Nicanor Alcalde, dueño de una Tintorería de igual nombre; "María Teresa", fundado y dirigido por Carlos Mitidieri; "Vanguardista", de Reinaldo Baylina con el vocalista Rogelio-Lilo Salazar Jordán; "Candela" de Agustín Sanches Bosalongo; "Los Carameleros", de los hermanos Cuní, donde hizo su debut ese gran sonero cubano Miguelito Cuni "El Caridad" muy nombrado y aplaudido; "Lira" de Margarito Santacruz; "Diamante", de Félix Bravo Echemendía; "Unión", del Niño Tabares y Toy Pons; "Favorito", de Tomás Ortiz Sánchez, "Ferroviario", "Jóvenes amigos ", de Elio Enrique Rivera; con posterioridad "Estrellas de Elio" el cubanísimo "Edén Pinareño" de Armando Silva; "Unión Musical" de los hermanos Tomás y José Gutiérrez; "Cuban Boys" de Macho Gómez; "Tropical Melody "de Lázaro Garriga; septeto "Pinar", septeto "Guajiro", de Agustín Sánchez; septeto "Estrella", de Jesús Cabrera -Caliban- la Charanga", de Remigio Cuní con Luis, Hilario y Felipe; Hermanos Paredes, Alejo Barrios, Gregorio Ríos -Goyo-, Leandro Paredes; "Los Churumbeles", que dirigía el pianista Guillermo Rubalcaba con la vocalización de Pablito Quintero, el veterano Cascabel, Antonio el Zapatero; Jesús Morales y su grupo "Artillería", con Francisco Arozarena, y en los distintos términos en la provincia gozaban de general preferencia Gumersindo Gutiérrez y su orquesta en Mantua, M.N. En Guane la primera orquesta femenina fundada en 1938 por Josefina Ramos; los Hermanos Díaz -Ursinio y Bienvenido-, Esteban Vaquero, Pastor y Cuco Vaquero, Hilario Ramos -Conde-, Humbelino Díaz; Sonora "Guanera", "Estrellas de Lazo" -Chicha Lazo-; conjunto "Guaney", Alberto Fajardo; Alberto Izquierdo, -Hermanos Izquierdo; Simón Rodríguez,- Goyita.

En Consolación del Sur, la "Mauritania" de Pepito Rubín; "Unión", actual Hermanos Palacios fundada en 1936, por Joaquín Crespo, los hermanos Escofet, Eustacio y Juan Palacios; Los Muchachitos Páez; Chichí el gallero, en el entronque a Herradura; Bartolo Alfonso en La Palma; en Puerto Esperanza, las charangas de Luis Rodríguez-Mundano, Juan Jerónimo y Cheo Páez, después fundó "Los Ases del 40" en San Cristóbal; en Viñales, Pablo Miranda y Los Chamizo; en San Juan y Martínez, la Arenamar, de Raymundo Argüelles -Mundo-, después la "Renovación", Jóvenes del Son, José María Quiróz, Juan López -Cantora-, Selecciones del 46; Danzonera de Carlos Soto, la charanga de Guzmán; el conjunto "Vivero", en San Luis, Eliseo Iglesias e Isaac Gómez, "El Favorito" de Segundo Marín; en Los Palacios "Transformación" de Yiyo Cuala.

Siempre queda alguno que no se cite, pero no olvidado, fue mucho el entusiasmo y el sacrificio de estos músicos por mantener sus agrupaciones.

En 1935 bajo el patrocinio del industrial José Antonio Capó Mendoza, un grupo de destacados músicos formaron la orquesta "Casa Capó", que gozó de generales simpatías y contaba con una gran legión de admiradores. La dirigió Mario González Zayas y pueden identificar en la foto de izquierda a derecha, a Aurelio Iglesias -pianista-, Alfonso Pastor -batería-, Joaquín Ortiz Sánchez -trompeta-, Angélico Ortiz Sánchez -saxofón y flauta-; el director Mario González Zayas, bajo; Publio Piñeiro, bombardino; José González Piloto, güiro; José A. González Camejo, saxo, y la vocalista Dora Díaz. Posteriormente también formó parte de la orquesta el baterista Florentino Frontela, radicado en Europa y que pasó una temporada en esta ciudad capital.

Muchos comerciantes y firmas patrocinadoras contribuían al mantenimiento de estas agrupaciones y sufragaban los gastos de instrumentos, uniformes, instrumentos, repertorio y recibían en cambio, divulgación donde las mismas se presentaban y actuaban.

Los músicos solventaban y sustentaban sus economías dedicándose a múltiples oficios y profesiones, entonces era una ilusión vivir de la música, esta se tocaba... "por amor al arte". Cuántos sacrificios para estudiar y posteriormente adquirir un instrumento. Así lucharon y trabajaron, por eso el recuerdo de generaciones de vueltabajeros les mantienen vivos, ellos se lo merecen. Digno homenaje a sus memorias.